"No hay influencia buena; toda influencia es inmoral..., inmoral desde el punto de vista científico. Influir sobre una persona es transmitirle nuestra propia alma"
Oscar Wilde
Existen dos premisas fundamentales en el actual sistema de enseñanza: una, su claudicación ante los intereses del Estado y el consecuente adoctrinamiento programado y otra, la nula preparación ‘social’ de la que se dota a los jóvenes.
¿QUÉ ES LA EDUCACIÓN?
"Educar", según la definición del diccionario de la lengua española es:
Educar.
(Del lat. educāre)
1. Dirigir, encaminar, doctrinar.
2. Desarrollar o perfeccionar las facultades intelectuales y morales del niño o del joven por medio de preceptos, ejercicios, ejemplos, etc.. Educar la inteligencia, la voluntad.
De hecho, educar es adoctrinar ―inculcar a alguien determinadas ideas o creencias― por tanto ¿qué podemos esperar de un procedimiento educativo basado en perpetuar un sistema obsoleto que en realidad poco nos enseña?
La psicología del desarrollo nos dice que los niños tienen una capacidad creativa y de aprendizaje muy elevada, mucho más de lo que se potencia en la educación. Es bien sabido que tenemos un gran potencial, sabemos cómo debería inspirarse a los alumnos, conocemos absolutamente todo a nivel teórico para dar una educación de extrema calidad.
Entonces, ¿cuál es el problema?
Todo el mundo es controlado por la misma fuerza. Es aquella que es capaz de entender la forma en que funciona la mente y las emociones humanas. Controla esto y controlarás todo lo demás.
Por tanto, pueden manipular nuestro estado emocional, cómo vemos el mundo y a nosotros mismos.
Es como si tuvieras un ordenador nuevo del que no sabes muy bien como opera, tal vez lo enciendas si encuentras el interruptor, tal vez dudes un poco... o a ver... "voy a probar esto... o lo otro". Todo resulta muy limitado por no conocer cómo funciona la máquina. Luego tenemos al programador, éste sí es gran conocedor de dicho ordenador, es el maestro y sabe perfectamente el potencial que puede obtener de él y por tanto puede “manipularlo” a su antojo.
Esta analogía resume perfectamente la grave situación en la que nos encontramos a nivel de un profundo adoctrinamiento social que comienza desde que somos niños, en la escuela.
Estamos a expensas de un sistema que se ha creado para controlar a la población. Evidentemente siempre nos lo venden como si fuera el mejor método para enseñar a nuestros hijos a evolucionar.
Pero si esto así fuere, ¿por qué hay fracaso escolar? ¿por qué nuestros jóvenes están perdidos?
Todos esto esta pasando porqué el sistema es conocedor del poder que tienen a su alcance y lo sabe aprovechar en demasía.
Ellos conocen y han estructurado perfectamente la sociedad, la comunicación... saben cuál es la información que nos llega y la que quieren que le llegue a cada niño desde la infancia. Saben que igual que tienen un gran potencial, son muy moldeables. Es como tener ese ordenador vacío y llenarlo del contenido que ellos quieran. Nos imponen su falsa realidad. Crean sus “ovejas computerizadas” en lugar de crear personas inteligentes, creativas y con ideologías propias.
Piénsalo bien, ¿no ves que el verdadero conocimiento se está falsificando? Estamos formando una sociedad de perfectos autómatas humanos que poco o nada saben sobre la sabiduría ancestral, sobre los grandes conocimientos que parecen quedar relegados a “los cuatro friquis de turno”… como si lo “normal” fuese ser tontos, pasivo-egoístas que no piensan en otra cosa más que en sexo, drogas y rock'n'roll, que aunque todo es bueno en su justa medida y la diversión forma parte de este gran juego de la vida, no podemos permitir que se convierta en la máxima de nuestra sociedad.
La escuela, desde muy pequeños se nos hace dura, pesada, monótona y difícil de seguir. Los contenidos, y cada año que pasa va a ir a peor, son arcaicos y totalmente obsoletos; se enseña un patrón de sociedad vacío, solo quieren formar a ciudadanos que NO PIENSEN, obreros trabajadores con pocas o ninguna idea propia, gente narcotizada con cero ideales.
La naturaleza de la realidad es la que cada uno de nosotros creemos y por tanto, es lo que queramos que sea. Pero estamos inmersos en un paradigma de neo-esclavitud que nos controla desde la más tierna infancia. Ellos nos moldean y rigen nuestra vida desde que empezamos a desarrollar las primeras ideas.
Nos cogen y nos meten en un lugar durante todo el día y al acabar debemos llegar a casa para estudiar más o "hacer deberes" y claro, que no falten las actividades extraescolares, pues si no practicas alguna, nos parece que no es suficiente para alcanzar de mayores el “éxito deseado”.
¿Te das cuenta?, ya la propia idea de necesitar alcanzar un éxito (que no es más que el resultado feliz de un negocio, o actuación y la buena aceptación que tiene alguien o algo), es una burrada, pues el mayor éxito reside en la sabiduría, en el amor que encuentras al relacionarte con los tuyos, el éxito es haberte conocido un poquito mejor para de adulto, poder seguir explorando tu espíritu y el de los demás.
Se busca pues, que el humano se instruya en una serie de conductas y pensamientos que se inculcan año tras año a través de la escuela y que quedaran impregnados en tu mente de por vida, llevándote sin remedio a la búsqueda de intereses ficticios y deseos inalcanzables que te harán sentirte infeliz para siempre.
Este es el sistema de control que nos ha llevado directamente al estado actual de pasotismo e ignorancia social.
Estamos hablando de programación mental inducida a través de una pésima gestión de la educación que se traduce en una hipnosis masiva de la población.
Te atontan y marean y cuando debes elegir sobre tu futuro, tu mente ni siquiera es capaz de saber qué es lo que quiere ser en esta vida.
Educa a estudiantes que en un futuro serán nuestros maestros; crean maestros dormidos que enseñan bien a dormir. En la mayoría de las asignaturas los contenidos de las materias que estudian nuestros pequeños están obsoletos.
Una sociedad sin una buena educación es una sociedad muerta.
Debemos ser conscientes de que la enseñanza constituye una gran responsabilidad, ya que esos alumnos serán la sociedad del mañana.
También existe una progresiva implantación de políticas de desatención infantil. Congelación de sueldos y un mayor número de horas de trabajo provocan en muchas ocasiones la ausencias prolongadas de los padres que se traduce automáticamente en la falta de atención a los niños, que se ven obligados a pasar más tiempo solos o en la escuela. Obviamente, esto causa a la larga cierta ‘alienación’ infantil, generando adultos menos comprometidos emocional y socialmente: es decir, más proclives a la manipulación.
Por otra parte, nuestra percepción de vivir en una sociedad sin clases, cuando la realidad es que los gobiernos tienden a polarizar las clases y a incrementar sus diferencias, es sólo el resultado de una propaganda gubernamental sin precedentes, disfrazada de ‘relaciones públicas’.
El enriquecer a la minoría privilegiada sólo busca perpetuar un estado aristocrático, en el que la mayoría menos pudiente siempre se mantiene en las mismas condiciones, si no empeoran; la frustración, en lugar de dirigirse hacia los emporios y sociedades implicados, se proyecta en los políticos, meros peones del juego que, ganen o pierdan, siempre tienen beneficios.
Aprender en libertad es poder elegir que aprendo y descubrir cómo.La Escuela es repetir lo establecido y acallar quienes somos.Aprender en libertad es conocerme junto a otros y descubrir la vida
Otro día sigo con mis rollos… los de mi mundo feliz particular… Ahora si quieres seguir informándote sobre el tema no te pierdas estos contenidos:
"Lo que importa, sobre todo mientras se es joven, no es cultivar la memoria, sino despertar el espíritu crítico y el análisis; pues sólo así se puede llegar a comprender el significado real de un hecho en vez de racionalizarlo"
Krsihnamurti
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